Análisis: el impacto de la renuncia del juez Anthony Kennedy
Anthony Kennedy ha sido juez de la Corte Suprema estadounidense durante 30 años y ejercerá sus funciones hasta el próximo 31 de julio. Es reconocido por su participación en la toma de decisiones fundamentales de situaciones éticas y legales del país. Su renuncia podría traer un beneficio para la postura conservadora del presidente Donald Trump.
Sus ideales de libertad y dignidad, basados en la Constitución promovieron decisiones de la corte como la protección a menores y discapacitados intelectuales de la pena de muerte. Su participación desde un punto neutral, lo convirtieron en uno de los jueces más esenciales de la Corte.
A través de una carta, Kennedy expresó su agradecimiento al presidente Donald Trump por haberle permitido permanecer en el Tribunal Superior y dijo que había sido un honor poder interpretar y defender la constitución.
Este miércoles, el juez visitó la Casa Blanca y se reunió con el presidente Trump, durante no más de una hora, el mandatario exaltó su labor sobresaliente y dijo que elegiría a alguien con su perfil.
Respecto a su remplazo, se especula sobre los jueces estatales y federales que publicó el presidente Trump en un listado, en el que resaltan Brett Kavanaugh, exempleado de Kennedy, Thomas Hardiman, Amy Coney Barrett, Raymond Kethledge, Amul Thapar, Allison Eid, jueces de apelación de los Estados Unidos que trabajan en los principales circuitos.
Redacción Club de Prensa.