Ataque atribuido a disidentes de las Farc en Cauca, Colombia, deja cinco militares muertos y 16 heridos
Cinco soldados fueron víctimas fatales al ser atacados, según se ha atribuido inicialmente, por una agrupación de disidentes de la extinta guerrilla de las FARC en la noche del 11 de marzo en Balboa, Cauca, departamento colombiano.
Se trata de dos suboficiales y tres soldados profesionales asesinados, además de otros tres heridos de gravedad y 13 más que no presentan afectaciones de consideración, según la Tercera División del Ejército Nacional de Colombia.
La caravana militar emprendía un viaje de aproximadamente 100 kilómetros para reinstalar un puente que a comienzos de marzo fue destruido por la Estructura Carlos Patiño.
Dicha agrupación está adscrita al Estado Mayor Central, EMC, quienes son parte de la disidencia de lo que era la guerrilla de las FARC y quienes no se acogieron al acuerdo de paz con el gobierno en 2016.
Mientras el convoy estaba en movimiento, un artefacto explosivo enterrado en uno de los taludes de la vía fue activado y terminó dejando sin vida a parte del equipo de la institución castrense.
“Lamento, condeno y rechazo el vil ataque terrorista de la Estructura Carlos Patiño en la Vereda la Esperanza, Balboa, Cauca contra la caravana del Ejército”, señaló el ministro de Defensa Pedro Sánchez, en la red social X.
El puente militar se ubica en la Hacienda y el Plateado, zona rural del municipio de El Tambo, también en Cauca, y sería una infraestructura provisional para hacer posible el movimiento de tropas y de la población civil en el sector.
El Ejército aseguró además que esa región al occidente del Cauca es un punto clave para la producción de cocaína, lo que puede estar relacionado con la presencia del grupo criminal en la zona.
La región es conocida como el Cañón del Micay, en donde la semana pasada secuestraron durante tres días a 28 policías y un militar que fueron liberados después de una intensa jornada de negociaciones.
Ese suceso generó nuevas tensiones en la zona, y generó la expulsión de soldados de una base militar cercana.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, manifestó la persistencia en su intención de recuperar la seguridad en dicha región el pasado lunes durante el consejo de ministros, pues el lugar es uno de los baluartes del grupo terrorista a cargo de alias Iván Mordisco.
Como uno de los líderes de las disidencias, alias Iván Mordisco decidió no hacer parte en 2024 de las negociaciones de paz que el EMC habría empezado con el gobierno de Gustavo Petro un año atrás.
A partir de ahí se ha intentado recuperar la zona con presencia militar y del Estado sin éxito alguno debido a los constantes saboteos y atentados por parte del grupo criminal.
Meses atrás el presidente Petro relacionó a Mordisco con un grupo denominado la Nueva Junta del Narcotráfico, cuyos cabecillas, según el mandatario, se instalaron en Dubái y planean asesinarlo.
Fue también este lunes en el consejo de ministros cuando el jefe de Estado mencionó que el EMC“no es una insurgencia, es un ejército privado del narcotráfico".
El gobierno trabaja en un programa de sustitución de narcocultivos por otro tipo de plantíos en varias regiones cocaleras del país que a la fecha sigue siendo el mayor productor de cocaína en el mundo.