Chile: ¿Habrá nueva constitución?

Tras el denominado estallido social de octubre de 2019, que llevó a Chile a vivir un proceso Constitucional, hoy tres años después, el país se divide en torno a la propuesta de la Carta Magna que será sometida a un plebiscito el domingo 4 de septiembre. Algunos sectores políticos y sociales ven con optimismo el documento y otros con desconfianza. Serán más de 15 millones de chilenos los que decidirán en las urnas el futuro del país. 

En entrevista con el programa ‘La Noche’ el doctor en historia, Pablo Lacoste explicó que este domingo se cerrará un ciclo de tres años que logró restablecerse desde las instituciones, de una manera democrática y llamó la atención sobre el significado que tiene para esa nación la próxima votación. “Todo el pueblo de Chile está obligado a participar de estas elecciones, pacífica y democráticamente. La mayoría va a dar un mandato para ver cómo sigue la historia de aquí para adelante. Esto es un avance desde el punto de vista de las instituciones y la consolidación de la democracia y de la paz en Chile”.

Carlos Cordero, director de la facultad de Ciencias políticas de la Universidad católica de Bolivia e investigador especializado en temas electorales y legislativos asegura que América latina está atenta a lo que pueda ocurrir en Chile, porque es uno de los últimos países en encarar un proceso de reforma a la constitución. “En América Latina estamos viviendo varios procesos electorales, una emergencia importante para la izquierda que ha optado por las urnas a fin de producir transformaciones importantes en el estado”.

Por su parte, Lacoste llamó la atención sobre la posibilidad de que desde el próximo domingo Chile reconozca la coexistencia de diversos pueblos y naciones en el marco de la unidad del Estado. “Se reemplaza por un sistema de justicia confuso donde se dice que cada uno tendría derecho a ser juzgado según las leyes de su propia nación. En relación con indígenas deberían tener las leyes de los mapuches, tener las leyes de los otros grupos. Entonces el problema es que esas leyes no están escritas. Por lo tanto, se generaría una especie de vacío legal y una situación de incertidumbre”

Redacción por Harriet Hidalgo