Despiden al jefe de Policía Pete Arredondo por su respuesta al tiroteo en la escuela Primaria Robb de EE. UU.
La Junta del Distrito Escolar de la ciudad de Uvalde, ubicada en el Estado de Texas, en Estados Unidos, despidió al jefe de Policía Escolar Pete Arredondo, de forma unánime, por la respuesta que tuvo a un tiroteo que hubo en la escuela Primaria Robb el pasado 24 de mayo en el que fueron asesinadas 21 personas.
Arredondo no asistió a la sesión tras argumentar que existían amenazas a su seguridad. Su abogado, George Hyde, no obstante, aseguró mediante una comunicación enviada a la junta que el único “responsable” de la tragedia fue el tirador.
Hyde también afirmó que Arredondo trató de salvar vidas durante el tiroteo, que no recaía sobre él la responsabilidad de ser el comandante del operativo y pidió la restitución de su puesto.
Rubén Torres, el padre de Chloe Torres quien es una niña que logró sobrevivir, aseguró durante la sesión que el día del tiroteo hubo “muchas fallas, especialmente de las autoridades”.
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“Si algo puedo decir a este respecto es que estos policías no han tenido la valentía de responder. No es que no tenían radio o que no hubo comando o control. Leí el reporte y dice que habían logrado controlar al atacante y no es verdad, el atacante siempre tuvo control y la Policía nos falló”, afirmó ante la junta.
Torres lamentó las consecuencias psicológicas que tienen los niños por cuenta de la masacre. “Mi hija al igual que otros sobrevivientes no pueden dormir (…). Va a madurar con el paso de los años, pero en este momento le es muy difícil lidiar con este evento tan difícil”, sostuvo.
Durante su pronunciamiento, Torres pidió que haya respuestas por las fallas que impidieron detener la tragedia.
“Realmente esperamos la decisión apropiada, tiene que haber responsabilidad porque ese día se perdieron vidas de 19 niños y de dos maestros. Son 21 familias. Es una locura que no se responda públicamente por lo que sucedió ese día”, aseveró.
La sesión coincidió con los tres meses de la tragedia que es considerada la segunda peor masacre en una escuela en la historia de Estados Unidos.
Un centenar de personas acudió a la sesión para ser testigos del despido. Varios portaron letreros y gritaron arengas con frases como “¡Cobarde!” y “Sin justicia no hay paz”.
Salvador Ramos, un adolescente de 18 años, irrumpió el martes 24 de mayo armado en la escuela y perpetró la masacre.
El comportamiento de la Policía, tras el tiroteo, fue objeto de un severo escrutinio al conocerse que tardó en actuar.
Redacción ntn24.1eye.us