Murió Gabriel González, hombre que asesinó a su hijo Esteban en un hotel de Melgar
Gabriel Enrique González Cubillos, el hombre que mató a su hijo de cinco años en un hotel del municipio de Melgar, en Colombia, falleció este lunes al parecer por un paro cardiorrespiratorio en un centro asistencial de Ibagué, Tolima, en su país.
De acuerdo con un reporte del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), el hombre había sido trasladado el pasado 26 de marzo al hospital Federico Lleras Acosta de Ibagué por una sobredosis de medicamentos. Allí permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) hasta su fallecimiento.
“El pasado 27 de marzo, sobre las 11:52 P.M. ingresa al Hospital Federico Lleras Acosta, paciente masculino de 50 años de edad, direccionado de la Cárcel COIBA de Picaleña, quien respondía al nombre de Gabriel Enrique González, por la ingesta de alrededor de 400 tabletas de múltiples medicamentos antihipertensivos y antidepresivos, como acción autoinfringida de manera suicida", informó un comunicado del hospital según medios locales.
González había sido sentenciado a 45 años de prisión por el asesinato de su hijo Gabriel Esteban el pasado tres de octubre y debía cumplir la condena en la cárcel La Picaleña, en Ibagué, Tolima.
Caso Gabriel Esteban
Eran las 4:07 de la madrugada del lunes 3 de octubre cuando Consuelo Rodríguez recibió un doloroso y aterrador mensaje: el que indicaba que su hijo Gabriel Esteban había sido cruelmente asesinado.
Todo inició el domingo cuando el sospechoso recogió al pequeño Gabriel en su casa ubicada en la localidad de Usme, Bogotá. En ese momento Consuelo no sospechó lo que le podría suceder a su hijo, pues, a pesar de que había presentado denuncias de acoso en contra de Gabriel Enrique por su insistencia para no terminar su matrimonio, el hombre se mostró bastante tranquilo cuando llegó como de costumbre a la residencia para compartir con el menor, con quien tenía “una buena relación” y a quien visitaba cada 15 días.
Sin embargo, la zozobra empezó cuando a las 9:30 de esa noche la mujer recibió a través de WhatsApp un mensaje en el que Gabriel Enrique le indicaba que en el baño de su casa podría encontrar una memoria USB con información sobre el macabro plan. Al revisar los archivos, Consuelo encontró dos videos: en uno de ellos le advirtió que iba a matar al niño y que, después, se iba a suicidar.
La madre del pequeño Gabriel alertó de inmediato a las autoridades, quienes activaron el protocolo de búsqueda en Bogotá y en diferentes pueblos aledaños para encontrar al menor. En un principio se presumió que los dos se encontraban en Tocancipá, municipio de Cundinamarca en el que residía el señalado asesino.
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Un cuarto de hotel: la escena del crimen
De acuerdo con el mensaje que el mismo Gabriel Enrique le envió a Consuelo, el pequeño Gabriel fue asesinado sobre las 3:55 de la madrugada a través de asfixia mecánica.
Sin pudor, el hombre le escribió el siguiente mensaje a través de WhatsApp: “Hora fallecimiento 3:55 a.m. Asfixia mecánica. No sufrió. Ahora sí puedes disfrutar sola con Edilson y Wesly sin tricitico ni mucho menos yo. Felicidades”.
A Gabriel Enrique no le bastó con enviarle ese doloroso mensaje, también le compartió a Consuelo una fotografía en la que le mostraba el cuerpo sin vida de su hijo y, después, le preguntó si había revisado el contenido de la memoria USB que le había dejado en el baño de su casa para luego señalar que esa había sido la consecuencia por “escoger al campesino”.
El cadáver del pequeño Gabriel Esteban fue hallado por las autoridades horas después luego de rastrear cámaras de seguridad e inspeccionar los mensajes que el señalado asesino le envió a Consuelo.
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Los investigadores lograron determinar que el menor se hallaba en Melgar, ya que en una de las sábanas que aparecían en la fotografía se evidenciaba una corona, la cual se pudo establecer que era el logo de un hotel ubicado en el centro de ese municipio del departamento del Tolima.
Miembros de la Policía llegaron hasta ese establecimiento de nombre ‘Hotel El Rey’ y en una de las habitaciones se encontraron con la impactante escena. Al interrogar a uno de los empleados, este indicó que Gabriel Enrique se presentó la noche anterior con un niño que aseguró ser su hijo y, a la mañana siguiente, huyó como si nada hubiera pasado con la excusa de que iba a comprar desayuno para el menor.
Néstor Raúl Cepeda, coronel de la Policía del departamento del Tolima, aseguró que las autoridades pusieron a disposición toda la capacidad de policía judicial para esclarecer este caso y que ya se iniciaron las acciones conjuntas con los miembros de la Fiscalía General de la Nación para “poder recaudar el material probatorio y dar captura al responsable de este lamentable hecho”.
