Trump insiste en "tomar" la Franja de Gaza y asegura que "no se necesitarían soldados"; la comunidad internacional responde en rechazo
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a referirse a su propuesta de "tomar el control de la Franja de Gaza", unas declaraciones que han generado fuerte rechazo en todo el mundo.
"Estados Unidos tomará el control de la Franja de Gaza y haremos un buen trabajo con ella. Seremos dueños de ella y seremos responsables de desmantelar todas las bombas peligrosas sin explotar y todas las armas", dijo el republicano el pasado martes al reunirse con primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
Trump también dijo que se “resolverá” el problema en Gaza y mencionó que nada de lo que pasó “hubiera sucedido” con él en el poder.
Ahora, a pesar de las críticas, Trump amplió su propuesta y matizó algunas de sus polémicas ideas, señalando que muchos pobladores de Gaza serán "reasentados" y "libres".
El magnate aseguró que, bajo su plan, "Israel entregaría la Franja de Gaza a Estados Unidos al finalizar los combates. Los palestinos, personas como Chuck Schumer, ya habrían sido reasentados en comunidades mucho más seguras y hermosas, con hogares nuevos y modernos, en la región".
"De hecho, tendrían la oportunidad de ser felices, seguros y libres. Estados Unidos, trabajando con grandes equipos de desarrollo de todo el mundo, comenzaría lenta y cuidadosamente la construcción de lo que se convertiría en uno de los mayores y más espectaculares desarrollos de su tipo en la Tierra", agregó.
Asimismo, Trump dijo que, para su operación "no se necesitarían soldados de Estados Unidos" y "reinaría la estabilidad para la región".
El secretario de Estado, Marco Rubio, dijo que la idea "no pretendía ser hostil" y la Casa Blanca reiteró que cualquier desplazamiento de palestinos sería "temporal".
Ola de rechazo hacia la propuesta:
Tras el controvertido proyecto, líderes mundiales y organizaciones de derechos humanos han acusado al mandatario estadounidense de querer ejecutar una "limpieza étnica".
Incluso el grupo terrorista Hamás, cuyos militantes perpetraron una masacre en territorio israelí el pasado 7 de octubre de 2023, se pronunció:
Es "una declaración de intención de ocupar el territorio" palestino, afirmó el jueves el portavoz de Hamás, Hazem Qasem.
"No necesitamos de ningún país para que dirija Gaza y rechazamos que se reemplace una ocupación por otra (...) Gaza pertenece a su pueblo y ellos no se irán", agregó el comunicado.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, reivindicó "el derecho de los palestinos a vivir (...) en su propia tierra" y se opuso a "cualquier forma de limpieza étnica".
Países como Egipto, Jordania, Arabia Saudita, Irán y la Unión Europea, también emitieron declaraciones de rechazo hacia la propuesta del republicano.
Abdelfatah El-Sisi, presidente egipcio, dijo desde El Cairo que "el desplazamiento y la expulsión del pueblo palestino de sus tierras es una injusticia en la que nunca participaremos".
