"El mensaje de Dios ha sido muy claro”: mujer cristiana se volvió modelo de Onlyfans por un “llamado divino”
Coutney Tillia es un modelo de Onlyfans que ha logrado mucho éxito debido al modelo de negocio que ha establecido en el que ofrece una cuenta gratuita, con merchandising, y una página VIP en la cual ofrece fotos y videos sexuales.
Gracias a esto obtiene ganancias mensuales de aproximadamente 380 mil dólares, más 160 mil que factura gracias a mensajes directos con sus seguidores, lo que permite darle una buena vida a sus cuatro hijos y ayudar al resto de su familia a vivir cómodamente.
Antes de incursionar en el mundo del contenido para adultos, Tillia era docente y atendía a niños con autismo, algo que la hacía feliz hasta que llegó un punto en el que no le alcanzaba para cubrir sus deudas y sus gastos, así que entró en una reflexión que le contó al medio TMZ en una entrevista.
“Había estado enseñando a estudiantes con necesidades especiales en una escuela alternativa en Phoenix durante seis años (...) De repente me encontré en un lugar realmente oscuro. Estaba comenzando a odiar mi trabajo y esa oscuridad comenzó a extenderse a otras áreas de mi vida", señaló la mujer.
“Cuando era maestra, mi familia realmente tenía problemas económicos (...) “OnlyFans me permite la libertad financiera. Puedo proporcionar todo lo que mi familia necesita y más", agregó la exmaestra en su entrevista.
Sin embargo, fue muy difícil para ella dar el paso, debido a sus creencias cristianas, pues nació en el seno de una familia perteneciente a esta religión que condena el trabajo sexual: "¡Tuve tanta vergüenza sexual al principio! Podía sentir los juicios que la sociedad y la religión me habían inculcado y era muy consciente de ello (...) Podía sentir los juicios que la sociedad y la religión me habían inculcado y era muy consciente de ello”.
Tillia tiene ahora mucho éxito en Internet y señaló que su nueva carrera “era parte del plan de Dios en su vida”: "El mensaje de Dios ha sido muy claro: estoy aquí para ser una estrella porno. Esta es mi forma de servir".
La mujer concluyó diciendo que "no estamos destinados a suprimir o negar cosas como nuestro placer y expresión sexual. En cambio, estamos destinados a disfrutarlos y encarnarlos completamente, como Dios lo ha dispuesto".
