Biden y Harris reaccionan al presunto intento de asesinato contra Trump; el sospechoso enfrenta cargos federales
Fue en horas de la tarde del pasado domingo 15 de septiembre que se reportó un aparente intento de asesinato en contra de Donald Trump en un campo de golf del candidato republicano ubicado en West Palm Beach, Florida.
Respecto al asunto, el presidente Joe Biden afirmó este lunes que el Servicio Secreto necesita más personal para cumplir con sus tareas.
"Una cosa que quiero dejar clara es que el Servicio (Secreto) necesita más ayuda, y creo que el Congreso debería responder a sus necesidades", dijo Biden a los periodistas en la Casa Blanca.
Asimismo, la vicepresidenta de la administración Biden, y candidata a la Presidencia de la Unión Americana, Kamala Harris, sostuvo: "Me alegro que esté a salvo, la violencia no tiene cabida en Estados Unidos".
El Grupo de Trabajo sobre el Intento de Asesinato del presidente Trump, Mike Kelly (R-Pa.), y el miembro de alto rango Jason Crow (D-Colo.), publicaron una declaración conjunta.
"Se está monitoreando este intento de asesinato del expresidente Trump en West Palm Beach. Hemos solicitado una reunión informativa con el Servicio Secreto de Estados Unidos sobre lo sucedido y cómo respondió la seguridad”, destaca la notificación.
"Seguimos profundamente preocupados por la violencia política y la condenamos en todas sus formas. El Grupo de Trabajo compartirá actualizaciones a medida que sepa más", añade.
Tras el presunto atentado, el Servicio Secreto precisó que se logró la detención de un hombre que portaba una AK47. El arma fue recuperada junto a una mochila y una cámara GoPro.
El sospechoso escapó en un automóvil negro, pero un testigo ayudó a la policía a identificar el vehículo y las autoridades lograron detener al conductor.
Medios estadounidenses identificaron al sujeto como Ryan Wesley Routh, un constructor de 58 años de edad que cuenta con varios antecedentes penales.
Según reportes, el individuo ha sido acusado de dos cargos federales: posesión de un arma de fuego por parte de un delincuente convicto y posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado.
El hombre llegó a la corte federal de Distrito Sur de Florida en West Palm Beach con grilletes en las manos y pies, escoltado por agentes de la Policía.
El juez Ryon M. McCabe presidió la audiencia en la que Routh fue representado por un defensor público.
Trump ya pasó por un intento de asesinato el el pasado 13 de julio cuando resultó herido en la oreja por uno de los varios disparos que se oyeron durante un mitin de campaña en el estado de Pensilvania.
El violento ataque terminó con el exejecutivo levemente herido, dos simpatizantes republicanos lesionados, y el tirador dado de baja.
