Miles de personas salieron a las calles de Madrid para protestar contra el Gobierno de Pedro Sánchez y la ley de amnistía
Este domingo, decenas de miles de personas se reunieron en el centro de Madrid para manifestarse contra el Gobierno español de Pedro Sánchez y la amnistía a los independentistas catalanes, cuatro días antes de que el Pleno del Congreso apruebe de forma definitiva la norma.
La gran manifestación para protestar contra la amnistía fue convocada por el líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, unas marchas que van desde la Puerta de Alcalá hasta la Gran Vía, pasando por la plaza de Cibeles.
Según los organizadores de las manifestaciones, cerca de 80.000 personas asistieron a las multitudinarias marchas que iniciaron desde las 12:00 pm (hora local).
Con pancartas con mensajes como: “España contra la amnistía y corrupción, Dimisión ya”, “Sánchez fuera del partido”, “Sánchez traidor y mentiroso”, “Rata vende patria”, los manifestantes comenzaron su recorrido por el centro de Madrid para demostrar su descontento.
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo aseguró en medio de las manifestaciones que: "¡Le pido que retire esta amnistía!”, mientras los asistentes coreaban "¡Pedro, dimisión!".
“España no se vende, España no se reparte, España es un Estado de derecho ante el que todos los ciudadanos somos iguales ante la ley, ante la justicia”, añadió el líder del PP, en presencia de los expresidentes de gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy.
Feijóo continuó su discurso frente a los miles de manifestantes, asegurando que: “Los españoles hemos de tener la garantía de que la ley tiene consecuencias, la garantía de que los delitos tienen consecuencias jurídicas, y que el gobierno no las puede parar”, además de pedirle a Sánchez que "convoque elecciones".
El Ejecutivo de Sánchez no logró aprobar la semana pasada dos leyes en el Congreso de los Diputados, la Cámara Baja del Parlamento, al no contar con el apoyo de los aliados que le permiten gobernar, entre los que están la extrema izquierda, los nacionalistas e independentistas catalanes y vascos, y un partido regionalista de las islas Canarias.
Las relaciones entre el Gobierno y la oposición conservadora y de extrema derecha estaban muy deterioradas por la amnistía y se tensaron mucho más por la investigación judicial a la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, por corrupción y tráfico de influencias.
Ante lo que consideraba un trato injusto y agresivo, Sánchez tomó, a finales de abril, la decisión inédita de retirarse cinco días de la vida pública a considerar su dimisión, un periodo que concluyó con el anuncio de que seguiría en su cargo.
En cuanto a la amnistía, fue una exigencia de los partidos independentistas catalanes para prestar el apoyo de sus catorce diputados a la investidura de Sánchez, lo que le permitió gobernar de nuevo pese a quedar segundo detrás del PP en las elecciones de julio de 2023.
El Congreso de los Diputados aprobará definitivamente el jueves la ley que beneficiará a unos 400 independentistas relacionados con la tentativa de secesión de Cataluña de 2017.
La "Proposición de Ley Orgánica de amnistía para la normalización institucional, política y social en Cataluña", podría beneficiar en primer lugar a Carles Puigdemont, el expresidente regional catalán que se refugió en Bélgica en 2017 eludiendo a la justicia española y que ahora podría volver a España.
