México solicitó más apoyo la ONU para enfrentar migración centroamericana
El miércoles, México solicitó a las Naciones Unidas más apoyo para su plan para detener la corriente de migrantes indocumentados que huyen de la pobreza y la violencia en América Central.
En una reunión con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, el ministro de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, solicitó la designación de un enviado especial para coordinar el trabajo que 14 agencias de la ONU están realizando sobre el terreno en México, El Salvador, Honduras y Guatemala.
La participación adicional de la ONU fue necesaria porque el trabajo "involucra no solo a varias agencias en México sino a todas las demás agencias en los otros tres países y México", dijo el embajador de México ante las Naciones Unidas, Juan Ramón de la Fuente, quien también estuvo presente en la reunión, según reseñó AFP.
El propio ministro dijo que la reunión con Guterres había sido "muy exitosa ... Pedimos una presencia de la ONU en la frontera".
Un portavoz de Guterres dijo que "el sistema de la ONU ha estado muy involucrado en el apoyo a México, ya que una gran cantidad de refugiados y migrantes cruzan su territorio" y dijo que es probable que se publique una declaración completa sobre la reunión el jueves.
Miles de migrantes centroamericanos han huido de la pobreza y la violencia, se dirigieron a México y se dirigieron a Estados Unidos, muchos de ellos organizados en masivas "caravanas".
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con cerrar la frontera y imponer aranceles a las importaciones mexicanas si México no detiene el flujo de migrantes desde el sur.
En tensas negociaciones, México ganó un retraso de 45 días en acciones punitivas a cambio de una promesa de desplegar a 6.000 miembros de la Guardia Nacional a lo largo de su propia frontera sur para comenzar a tomar medidas enérgicas contra el flujo de migrantes.
"La migración no está prohibida", dijo Ebrard. "Pero no vamos a permitir el tráfico de menores como ellos, el tráfico de personas".
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obredor, y su homólogo de El Salvador, Nayib Bukele, tienen previsto lanzar el jueves uno de los planes de desarrollo para detener el flujo de migrantes.
El plan incluirá 30 recomendaciones de políticas públicas para impulsar el crecimiento y el empleo en la región, aliviando así la presión sobre las personas para que abandonen sus países de origen.
México aportará "varios millones de dólares" al plan, dijo Ebrard.
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