Los Raptors y Blazers avanzan a la final de conferencia
Los Toronto Raptors vencieron este domingo 92-90 a los Philadelphia Sixers en un séptimo encuentro épico que decidió Kawhi Leonard con una canasta sobre la chicharra, mientras C.J. McCollum sentenció a los Nuggets en el triunfo de los Blazers 100-96 en Denver.
Los Raptors se enfrentarán ahora en la final del Este a los Milwaukee Bucks y Portland chocará con los Warriors en la última instancia del Oeste.
Según reseñó AFP, en un partido en el que los canadienses basaron todo su juego en Leonard, los Raptors se mostraron más acertados en los últimos minutos y el ex de los Spurs se vistió de héroe al encestar sin espacio y sin tiempo para dar el triunfo a los suyos.
"Me siento genial. Lancé lo más fuerte que pude", resumió el alero tras la contienda.
El balón golpeó en el aro y se paseó por encima durante unas últimas décimas eternas, que encogieron el alma de los aficionados y de los jugadores antes de entrar.
El pívot camerunés Joel Embiid, defensor de Kawhi en la última posesión, se dirigió a los vestuarios cabizbajo y con lágrimas en los ojos, reflejando el sentimiento de un equipo que se quedó a milímetros de la final de conferencia.
En tanto, Damian Lillard firmó uno de los partidos más grises de su carrera en el tiro, con 13 tantos en 3/17 en el lanzamiento, McCollum se erigió en el arma principal de Portland, manteniendo a los Blazers vivos cuando más lo necesitaban en la primera mitad y sentenciando en los últimos minutos con canastas decisivas.
Así, el escolta finalizó con 37 tantos, 14 de ellos en el tercer cuarto, más nueve rebotes y una serie de 17/29.
"Para mí se trata de aparecer en cada partido. Lillard es el corazón de nuestro equipo. Es el que nos ha traído hasta aquí. Es increíble cómo trabajan todos de forma tan dura (en nuestro equipo)", celebró McCollum tras el choque.
"Es posiblemente la victoria más importante de la franquicia en mucho tiempo. Ser parte de ello y de la forma en la que lo hemos conseguido, estoy feliz por nuestros chicos", dijo el técnico Terry Stotts.
Los Nuggets gozaron de una ventaja máxima de 17 unidades en el segundo cuarto pero los Blazers nunca bajaron los brazos, fueron recortando su margen paulatinamente y se hicieron con la delantera a mediados del último período para ya no volver a soltarla.
Así, con menos de medio minuto por delante y 96-95 para Portland, McCollum pidió la pelota y anotó a falta de 11 segundos para poner 98-95 a los de Oregón. A continuación, el pívot serbio Nikola Jokic recibió una falta, falló su primer tiro libre y el encuentro murió desde la línea de personal.
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