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Domingo, 22 de diciembre de 2024
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Judicial

Condenan a cinco hombres a cadena perpetua por el crimen de Fernando Báez Sosa en Argentina

Los acusados se encontraban en prisión preventiva desde 2020, fecha en la que murió Báez Sosa.

Este lunes un tribunal en Argentina condenó a cinco jugadores aficionados de rugby del mismo equipo por matar a golpes a un joven en un delito con tintes racistas. Tres acusados más fueron condenados a 15 años de prisión por participar en el asesinato de Fernando Báez Sosa, un joven de una familia de inmigrantes paraguayos.

De acuerdo con la sentencia del Tribunal Oral de Dolores, Máximo Thomsen, los hermanos Luciano Pertossi y Ciro Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli “fueron acusados por el delito de homicidio doblemente agravado, premeditado por dos o más personas y por alevosía en concurso real por lesiones leves”, es por eso que los mencionados estarán en cadena perpetua. 

Entre tanto, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi, primo de los hermanos, fueron condenados a 15 años por participar secundariamente en el mismo delito. 

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Cabe aclarar que los fiscales del caso habían buscado la pena máxima de cadena perpetua, argumentando que el asesinato fue premeditado. Mientras que los abogados defensores argumentaron que no se había probado la premeditación en el crimen y pidieron al tribunal que imponga una sentencia más leve por un delito menor.

Como se recordará los acusados se encontraban en prisión preventiva desde 2020, asimismo, expresaron remordimiento durante las audiencias e insistieron en que no tenían intención de matar a Báez.

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Durante el brutal ataque por parte de los rugbiers a un joven cuyo padre es trabajador de construcción y cuya madre se dedica a cuidar a los adultos mayores, varios testigos del lugar aseguraron que en repetidas ocasiones los agresores llamaron a la víctima como “negro de mi***a”.

Todo ocurrió en una pelea de discoteca, los implicados fueron desalojados pero su riña siguió en la calle. Báez se aisló de sus amigos y fue rodeado por los ocho atacantes que le propinaron múltiples golpes que lo dejaron sin vida. 


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