Chile elige alcaldes y gobernadores en medio de escándalos que podrían favorecer a la derecha
Sacudidos casos de corrupción y abuso sexual en la política, los chilenos eligen a partir de este sábado a alcaldes y gobernadores, en comicios que medirán fuerza para las presidenciales de 2025 y en los que la derecha tiene mejor chance.
Más de 15 millones de chilenos están habilitados para votar en estas elecciones con voto obligatorioy que se realizarán en dos días, debido al gran volumen de cargos a elegir: alcaldes, concejales, gobernadores regionales y consejeros regionales en los 345 municipios del país.
Las facciones de izquierda que apoyan al gobierno Gabriel Boric lograron unirse para estos comicios, mientras que la oposición de derecha se presenta fragmentada entre los partidos conservadores tradicionales y el partido Republicano, una formación de ultraderecha.
Si bien estas elecciones tradicionalmente se consideran un barómetro de la presidencial, es la primera vez que todos los mayores de 18 años están obligados a votar, lo que le añade incertidumbre a los resultados.
También es incierto el impacto de la serie de escándalos que han sacudido a la sociedad chilena las últimas semanas.
Primero, el caso "Hermosilla" sobre la red de tráfico de influencias que montó el prestigioso abogado de la élite Luis Hermosilla y que impactó en la derecha tradicional por los vínculos que estableció con ese sector.
Luego, la denuncia de violación que derribó hace una semana a Manuel Monsalve, el hombre fuerte de seguridad del gobierno de Boric.
El aumento de los delitos violentos ha llevado a que la seguridad sea la principal preocupación del país.
Con todo, y ante la gran votación que el oficialismo consiguió en los comicios pasados de 2021, en el que le arrebató municipios claves a la derecha, el gobierno podría celebrar triunfos importantes.
Se espera que en la populosa comuna de Maipú, en el oeste de Santiago, arrase el actual alcalde oficialista Tomás Vodanovic.
Un factor importante será también el voto migrante, con 786.000 extranjeros, en su mayoría peruanos, venezolanos y haitianos, habilitados para votar. En comunas como Santiago e Independencia, de la capital, representan casi un tercio del padrón.
Chile permite el voto de extranjeros en todas las elecciones después de cinco años de residencia en el país.